Marruecos es mucho más que un destino turístico exótico: es una aventura viva, ideal para quienes buscan emociones auténticas sobre dos ruedas. Su cercanía a Europa, su variedad de paisajes y su cultura única lo convierten en un paraíso para los motoviajeros.
Desde las montañas del Rif hasta los desiertos del Sahara, Marruecos ofrece pistas infinitas, carreteras panorámicas y desafíos para todos los niveles. Y lo mejor: lo tienes a tiro de ferry desde España.
El desierto, especialmente la zona de Merzouga y el Erg Chebbi, es uno de los lugares más impactantes para recorrer en moto. Las dunas doradas, los oasis escondidos y la hospitalidad bereber crean un entorno que difícilmente olvidarás.

Evita los extremos. El calor del verano (junio a agosto) puede ser asfixiante, especialmente en el sur del país. Las mejores épocas son:
Primavera (marzo a mayo): temperaturas suaves, paisajes verdes en el norte.
Otoño (septiembre a noviembre): clima agradable, ideal para cruzar el Atlas y recorrer pistas.
Si vas en invierno, prepárate para el frío en zonas altas (Midelt, Atlas) y noches heladas incluso en el desierto. La ventaja: menos turismo.
Antes de arrancar, asegúrate de llevar:
Pasaporte en vigor (mínimo 6 meses de validez).
DNI (no es válido para entrar al país, pero llévalo por si acaso).
Seguro de viaje con cobertura en Marruecos (opcional pero muy recomendable).
Tarjeta verde del seguro de la moto, con Marruecos cubierto. Si no está incluida, contrátala en la frontera.
Permiso de circulación de la moto.
Permiso internacional de conducir (no siempre lo piden, pero es aconsejable).
Formulario D16ter: se rellena online o en el puerto al entrar. Permite la entrada temporal de tu vehículo. ¡Guárdalo bien, lo necesitarás al salir!
Los principales puntos de cruce son:
Algeciras – Tánger Med: la opción más popular. Travesía rápida y buenas conexiones.
Tarifa – Tánger Ville: ideal si quieres visitar el centro de Tánger directamente.
Motril – Nador o Alhucemas: buena alternativa si vas hacia el Rif o el desierto por el este.
Almería – Melilla: cómodo si quieres hacer una ruta más tranquila por el noreste.
Consejo: llega con tiempo al puerto. Ten los papeles listos, lleva fotocopias y paciencia para la aduana.
Una buena planificación comienza por definir el itinerario. Estas son las rutas más recomendadas:
Ruta 1: La Clásica (Tánger – Merzouga por el Atlas)
Tánger
Chefchaouen
Fez
Azrou
Midelt
Erfoud
Merzouga (Erg Chebbi)
Ruta 2: Atlántico y Sahara Occidental (Tánger – Dakhla)
Tánger
Rabat
Casablanca
Agadir
Tiznit
Tan-Tan
El Aaiún
Dakhla
Ruta 3: Ruta este por el Rif y el Ziz
Nador
Alhucemas
Guercif
Bouarfa
Errachidia
Merzouga
Consejo motero: planifica etapas de entre 250 y 400 km diarios si combinas asfalto y pista. Reposta cuando puedas y siempre lleva agua y comida encima.
No necesitas la moto más cara, sino la más fiable y polivalente. Algunos criterios clave:
Autonomía: mínimo 250 km. Ideal con depósitos de 20 litros o más (como la Rieju 307 Rally o la BMW F850GS).
Peso: cuanto más ligera, mejor en arena y pistas. Una Yamaha XT600E o una Voge 300 Rally son excelentes opciones.
Suspensiones: deben estar en buen estado y tener buen recorrido si vas a salir del asfalto.
Mantenimiento: lleva la moto revisada, con neumáticos nuevos o semi nuevos. Evita estrenar componentes justo antes del viaje.
Para ti:
Casco ventilado, con visor solar
Chaqueta y pantalón con protecciones (tipo trail, ventilado)
Botas de enduro o trail
Chaleco reflectante (por normativa)
Guantes (de calor y de frío)
Para la moto:
Herramientas básicas + kit repara pinchazos + compresor
Cámara de repuesto si llevas ruedas con cámara
Cinta americana, bridas, aceite de cadena
Filtro de aire limpio
Soporte móvil + cargador USB
Equipaje recomendado:
Alforjas laterales blandas o rígidas
Bolsa sobredepósito
Mochila de hidratación
Marruecos es un país hospitalario con múltiples opciones:
Riads y hoteles moteros: desde 20€ hasta 60€/noche. En Merzouga, prueba el Riad Madu o el Kasbah Azalay.
Jaimas en el desierto: noche mágica bajo las estrellas. Incluyen cena, música y desayuno (precio medio: 30-50€).
Wild camping: posible, pero no siempre recomendable. Usa apps como iOverlander o Park4Night.
Camping con instalaciones: muy comunes y baratos. Ideales si viajas en grupo y quieres ducharte bien o reparar algo.
La cocina marroquí es tan rica como variada. Algunos platos que no te puedes perder:
Tajín de cordero o pollo: cocinado en barro, con ciruelas, pasas o verduras.
Cuscús: tradicional de los viernes, servido con caldo, carne y verduras.
Harira: sopa especiada de lentejas y garbanzos, ideal para cenar.
Pan khobz: pan tradicional redondo, siempre presente.
Té a la menta: símbolo de hospitalidad. Te lo ofrecerán varias veces al día.
Consejos:
Come donde veas gente local.
Evita ensaladas crudas fuera de sitios fiables.
Bebe siempre agua embotellada.
Marruecos es relativamente seguro, pero conviene tener en cuenta:
Controles policiales: son frecuentes. Respeta las señales y lleva toda la documentación a mano.
Radares móviles: especialmente en zonas urbanas. No corras en carreteras nacionales.
Conducción local: en pueblos, prepárate para maniobras inesperadas, peatones y animales sueltos.
En pistas: baja presión de neumáticos, conduce con suavidad y avisa si vas en grupo con intermitentes o señales.
Lleva un botiquín completo con lo básico: analgésicos, antidiarreicos, vendas, desinfectante.
Seguro de viaje con cobertura sanitaria y repatriación.
Evita el agua del grifo, y usa repelente de insectos en zonas húmedas.
En caso de urgencia, dirígete a hospitales públicos en grandes ciudades o clínicas privadas.
Dunas de Erg Chebbi: ideales para recorrer al amanecer o al atardecer.
Oasis escondidos: como el de Tisserdmine.
Pueblos bereberes: descubre la vida nómada, los mercados y la música tradicional.
Actividades: excursiones en dromedario, rutas en quad, dormir en jaimas, contemplar las estrellas.
Dinero: lleva algo en efectivo, pero también tarjeta. Hay cajeros en ciudades.
Idioma: el francés es útil, pero muchas personas entienden algo de español.
Cultura: respeta las costumbres, viste con discreción en pueblos y evita sacar fotos sin permiso.
Tecnología: usa apps como Maps.me o Gaia GPS. Compra una SIM local con datos (INWI o Orange).
Recorrer Marruecos en moto no es solo viajar: es vivir. Cada kilómetro te regala paisajes distintos, aromas nuevos y encuentros inolvidables. El contraste entre el norte verde y el sur árido, la hospitalidad de su gente y el espíritu libre de la aventura hacen que esta ruta sea una de las más impactantes que puedes hacer.
Prepárate bien, planifica con sentido, y déjate llevar por las pistas y caminos que se abren ante ti. El desierto te espera.

Las tablets rugerizadas se están convirtiendo en la herramienta definitiva para navegar en moto. En esta guía analizamos los mejores modelos para trail y aventura —Carpe Iter, Samsung Active, Blackview y Doogee— con precios, puntos fuertes, enlaces de compra y recomendaciones según tu tipo de moto y ruta.

Pack-list 3×3, presiones que sí cambian el control, navegación sin dramas, mecánica de pista y un checklist de 60 segundos. Todo lo que usamos guiando en ACT, TET y Marruecos para viajar mejor y más seguro.

Dar la vuelta al Erg Chebbi es una ruta circular fácil de querer y difícil de olvidar: pistas rápidas, lenguas de arena para practicar, paradas con encanto y un mar de dunas naranja de fondo. Con técnica básica de off-road, algo de cabeza y buena hidratación, te llevas una jornada épica.